Campana 7 vs 30 Obras
Obras no tuvo piedad
El sábado aplastó a Campana y se dio el gusto de cortar una racha de siete derrotas consecutivas ante los tricolores. La visita jugó un partidazo y prácticamente lo ató de pies y manos a un Ciudad que viene de mal en peor.
La diferencia de 23 puntos que refleja el marcador final del partido que jugaron por la cuarta fecha del Reubicación IV Obras Sanitarias y Ciudad de Campana, deja al descubierto el abismo entre un conjunto que jugó a ganar, con decisión y solidez, y otro que entró a la cancha dubitativo y con pocas ideas. Los tacheros jugaron en gran nivel y avasallaron a un Campana irreconocible para afirmarse en los primeros puestos del campeonato.
Obras no tardó en romper el cero en el marcador. A poco de comenzado el encuentro Diego Ojeda interceptó una pelota en la mitad de la cancha y corrió a paso firme hasta el ingoal, agarrando a la línea campanera lanzada en ataque. A partir de allí la visita empezó a manejar las riendas del encuentro y encontrando en su efectividad la principal clave de una victoria que nunca estuvo en peligro.
Basándose en una obtención casi perfecta de la pelota, Obras siempre fue superior a su rival. Con un pack de forwards experimentado y potente, arrasó a los gordos campaneros en cada scrum y ganó casi todos los lines, permitiéndole a sus backs jugar una gran cantidad de pelotas limpias y tomando a la defensa local muy profunda o mal parada, lo que favoreció sus ataques punzantes.
La estupenda labor de los delanteros porteños también se evidenció en los mauls, un arma letal con la que lastimaron cada vez que se lo propusieron.
En el juego abierto la línea de ¾ (integrada por una camada de jóvenes y buenos jugadores y el experimentado capitán Maxi “Pico” Bacci) también se lució: cometieron pocos errores de manejo, fueron para delante con decisión y facturaron cada vez que pudieron.
Del otro lado, el tricolor no ofrecía respuestas. Se vio descompensado constantemente en defensa y nunca pudo atacar con claridad debido al tackle de su rival y a sus propias limitaciones en la generación de jugadas de riesgo. Los gordos padecieron al pack contrario en las formaciones fijas y tampoco pudieron neutralizarlos en el juego suelto o en los mauls, en tanto que a los backs les faltó agresividad e ideas para romper la defensa porteña.
Con esta victoria Obras confirma su buen momento en el R IV, al ubicarse en el cuarto puesto, a cinco unidades del líder y cuatro de los escoltas, con tres triunfos y sólo una derrota. Por su parte, Campana retrocedió al octavo lugar y quedó muy cerca de los últimos cuatro escalones, poniendo en peligro su clasificación a los Playoffs.
Cortaron el maleficio
Obras interrumpió el sábado una seguidilla de siete derrotas consecutivas (teniendo en cuenta el traspié en la Copa Buenos Aires 2010) ante el Club Ciudad de Campana, al que no vencía oficialmente desde el 14 de abril de 2007, por la tercera fecha de la primera ronda del Grupo IV
